Por muchas generaciones, mujeres indígenas Wichí reunidas en grupos y, sentadas en el suelo, han trabajado las hojas de Chaguar: luego de la recolección, limpiándolas, secándolas, tiñéndolas con los colores del monte; y finalmente hilando y tejiendo las mismas. Recreando técnicas y conocimientos ancestrales que se han ido transmitiendo de generación y generación, van combinando formas y colores en sus diseños. Sus creaciones son realizadas con materiales naturales extraídos de la Tierra donde viven, artesanales, intuitivas y libres, a partir de los secretos que el monte les ha ido develando, teniendo como resultado piezas únicas.